¿Cómo hacer de la pandemia una oportunidad para la transformación cultural de las empresas?

La pandemia transformó los hechos externos (para los clientes, los trabajadores, los proveedores, los directivos, el estado, etc. etc.) y con ello nos desafía a transformarnos como personas y como grupos familiares, empresariales, etc.

Las propuestas de importantes referentes de la transformación cultural, coinciden en la necesidad de definir una estrategia para luego pasar a la ejecución. La pandemia no dio tiempo para esto y se convirtió en un desafío de transformación organizacional y personal, aquí y ahora.

Sin embargo, de la experiencia de los expertos que están liderando el cambio de grandes empresas, como Ronald Heifetz y Francisco Lanúz, extraemos recomendaciones útiles para la transformación que estamos viviendo.

Ronald Heifetz, Director fundador del Centro para Liderazgo Público de la Escuela de Gobierno John F. Kennedy, Universidad de Harvard, propone “subir al balcón” para observar “la fiesta” y luego bajar a “bailar”. En otras palabras, ver el sistema completo de la empresa en relación con su entorno, para liderar con una mayor comprensión y conexión con lo que realmente siente, piensa y hace cada persona y cada grupo.

Por ejemplo, en la realidad actual de las empresas, al afrontar menores volúmenes de ventas, en lugar de que los empresarios conecten con el miedo y tomen rápidas decisiones para reducir gastos, conectemos con la calma, analicemos lo que pasa con las personas que hacen el trabajo, si recorto o no, cada uno de los principales gastos. Ojo, con un erróneo sentido de urgencia que se podría convertir en ceguera por urgencia.

Francisco Lanúz, facilitador en Harvard Business Publishing, experto en cultura y liderazgo y transformación digital, en línea con Heifetz, propone cuidar las pérdidas y lealtades de las personas afectadas por el cambio. Por tanto, es importante que el análisis del sistema para tomar las decisiones de reducción de gasto, no venga solo desde el directorio, del gerente general y del equipo de gerentes, sino que involucre a todas las personas de la organización. No como un diálogo de pedidos de unos y concesiones o negaciones de los otros. Sino mediante conversaciones que coloquen a cada uno como responsable de “sacar adelante” a la empresa y así co-crear caminos viables para lograrlo y celebrarlo.

Si las empresas no cuentan con la motivación de las personas que hacen el trabajo: ¿con qué cuentan? Si los diversos grupos de una empresa no conocen lo que piensan y sienten los otros, qué posibilidades de unirse para “sacar adelante” la empresa tienen?

¿Qué se necesita aprender para que todos los grupos, actores, stakeholders de la empresa co-creen caminos viables para “sacar adelante” a la empresa y celebrarlo?

Nada sería más erróneo ni generaría más desperdicio de recursos, que tratar este problema de personas como si fuera un problema de procedimientos, normas y órdenes en un esquema jerárquico.

Se trata de un desafió de aprendizaje a las personas de la organización que consiste en aprender a relacionarse con las demás personas. Concretamente es:

• Aprender a estar conscientes del todo de la empresa, en todo momento. Estar conscientes de que empresa no es la empresa que veo desde mi cristal, también es la empresa que ven los otros desde otros cristales. Todas personas y grupos, cada uno tiene sus propias ideas para aportar a la nueva versión de la empresa, así como también con sus propias resistencias. “Nuestra verdad no es la verdad”.
• Aprender a dialogar. Implica aprender a: escuchar a los otros con respeto, con el objetivo de comprender por qué dicen lo que dicen y piensan lo que piensan; así como también aprender a expresarse con fundamento, con respeto y con el objetivo de “sacar adelante la empresa”.

El resultado de estos aprendizajes será un propósito que hace vibrar. Contando con la consciencia de las personas que constituyen la empresa y con la capacidad de dialogar, la empresa estará lista para redefinir o refrescar, su propósito. Un propósito que haga vibrar a las personas de los diferentes grupos y las mantenga motivadas a seguir co-creando hasta “sacar adelante la empresa”. Esta nueva realidad no será el final de un proyecto de cambio, sino el comienzo de una nueva forma de vida cotidiana en una empresa con personas motivadas.

¿Cómo realizar estos aprendizajes? En D.O.S. somos un equipo de profesionales expertos en el desarrollo y la transformación humana, interesados en ayudarte a co-crear esta empresa con personas motivadas. Hacemos diseños a la medida de tus necesidades y posibilidades, con resultados visibles mediante comportamientos en el trabajo cotidiano, y sostenibles en el tiempo.