FORMAS DE SER DEL LÍDER DEL EQUIPO DE UN PROYECTO (3/3)

FORMAS DE SER DEL LÍDER DEL EQUIPO DE UN PROYECTO (3/3)

Por Estela Hernández, Master en Gestión de Proyectos (ICAP) y Coach Ontológico (PUCP) — CEO D.O.S

Con base en nuestro artículo: Liderazgo de Equipo de Proyecto en el que analizamos las particulares condiciones de trabajo de las personas que ejecutan un proyecto, tomando como referencia las investigaciones de Patrick Lencioni y Luis Carchak, propusimos seis ideas sobre las formas de ser que un líder de proyecto necesita cultivar. En el artículo anterior desarrollamos dos de ellas y ahora les presentamos las dos últimas:

5. Ser ejemplo de responsabilidad con el resultado.

Todos sabemos la importancia de que el líder y cada miembro del equipo, sea responsable con los resultados del proyecto. Ese no es el tema a comentar. El tema acá es cómo ser responsable ante situaciones difíciles. En situaciones en las que cumplir con tu responsabilidad es “caer pesado” o “caer antipático” e incluso perder una relación, un negocio o un cliente.

Por tanto, ser ejemplo de responsabilidad implica, entre otros, los siguientes comportamientos:

  • Abrir conversaciones con miembros del equipo que no están cumpliendo su responsabilidad como técnicos o su responsabilidad de encarnar la cultura del proyecto (descrita en los artículos anteriores mediante las formas de ser del líder y de su equipo).
  • Sostener los límites entre la responsabilidad de ejecutar el proyecto y expectativas del cliente o de otros actores, que demanden resultados, más allá de los establecidos contractualmente.
  • Implica, la responsabilidad de reconocer y compensar con creces, el incumplimiento de procesos y resultados establecidos en el contrato.

Tales comportamientos requieren que el líder del proyecto sea una persona cuidadosa en el compromiso que asume al liderar, en precisar con toda claridad el alcance y los límites, que le darán el marco de acción para los comportamientos descritos. Además, se requiere que sea una persona que valore más cumplir con la responsabilidad que ha asumido que cualquier beneficio personal (así sea el de ser simpático). En el fondo también es un tema de respeto del líder hacia sí mismo y hacia las personas del proyecto y del entorno de éste.

6. Ser el alma del equipo.

Esta forma de ser es necesaria para todo líder que quiera trascender en las personas y en la sociedad, sin limitarse a generar un resultado y recibir dinero por ello. Sea líder de un proyecto, de una empresa en estado de régimen, de un país, etc.

Comenzaremos por preguntarnos ¿Los equipos de trabajo tienen alma? ¿A qué llamamos el alma de los equipos? ¿Qué es ese invisible que se manifiesta arrancar la ejecución de algunos con entusiasmo y no con desgano? ¿Qué ideas, valores, emociones, posturas corporales, tonos de voz, miradas hacen que así sea? No existe una receta para combinar estos elementos. Lo único que existen son personas con capacidad de ver lo que es físicamente invisible y que conecta a los miembros de un equipo entre sí, y a ellos con un propósito superior. Estas personas, son los líderes. Como dice Debashis Chatterjee, en su libro EL LIDERAZGO CONSCIENTE: “La tarea de un líder consiste en convertir los esfuerzos condicionados de los miembros del equipo en un ofrecimiento incondicional”.

Leave A Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *